De un tiempo a esta parte, cada vez hablamos más del síndrome burn-out. ¿La causa? Demasiado estrés en el trabajo. Para evitar llegar hasta esta situación de cirsis, es esencial saber gestionar las tensiones ligadas a la actividad profesional.
¿Cómo conseguirlo? Hoy te damos algunas claves para saber cómo gestionar el estrés en el trabajo para ser más productivo:
1. Aprende a relativizar. Lógicamente, el estrés laboral tiene causas múltiples. Sin embargo, el sentimiento de angustia en el entorno laboral se explica siempre por un factor: la distorsión entre la situación real y la que tú percibes. Tomar conciencia de esa diferencia te ayudará a atenuar tu malestar. Intenta generar pensamientos positivos y desdramatizar.
2. Espacio de trabajo agradable. El confort físico también influye a la hora de sentirse bien en el trabajo y nos permite gestionar mejor el estrés. La calidad de vida en el trabajo pasa por un espacio limpio, ordenado y con un mobiliario adecuado. Una silla de trabajo ergonómica te ayudará a evitar tensiones en las piernas y la espalda.
3. Valórate. Una manera de gestionar el estrés en el trabajo consiste en valorarte. Haz una lista con tus cualidades profesionales. Distingue los puntos fuertes y aquellos que deberías mejorar para trabajar más sobre ellos.
4. Respeta las pausas. Cuando las tensiones se acumulan, es necesario parar. La calidad de vida en el trabajo pasa por respetar una serie de pausas. No pases toda la mañana frente al ordenador. Sal a estirar las piernas, toma un tentempié saludable y, sobre todo, respeta la pausa de la comida. Te ayudará a cambiar de aires y afrontar el trabajo con energías renovadas.
5. Mantén un estilo de vida saludable. Cuida tu alimentación y la calidad de tu sueño. Haz ejercicio y dedica tiempo a aquello que te hace sentir bien para descargar todas las tensiones acumuladas a lo largo del día.
Como ves, son pautas muy sencillas que, si aplicas a tu vida diaria, te ayudarán a gestionar mejor el estrés, evitar el síndrome burn-out y mejorar tu productividad.