¿Quieres mejorar tu productividad laboral? Para ello, mantener la mente despierta y sentir confianza en uno mismo son dos condiciones sine qua non. Toma nota de estos hábitos diarios que te ayudarán a mejorar tu productividad:
1. Haz ejercicio. Cuando haces ejercicio, estás generando energía. El ejercicio actúa como un sistema de defensa que ayuda a nuestro cuerpo y a nuestra salud mental. El ejercicio aeróbico aumenta el tamaño del hipocampo anterior, estrechamente relacionado con las mejoras en la memoria y la cognición.
Basta con integrar una actividad aeróbica en tu ajetreada jornada laboral. Por ejemplo, con caminar entre 30 y 40 minutos ya estarás contribuyendo a tu productividad. Siempre puedes ir al trabajo caminando o, si utilizas el Cheque Transporte, bajarte un par de paradas antes para cumplir con tu rutina de ejercicio diario.
2. Aprende nuevas habilidades. Si quieres mantener tu mente despierta, sal de tu zona de confort. Si te mantienes siempre en tu zona de confort, corres el riesgo de que tu mente se acomode y se adormezca.
Aprender nuevas habilidades es un estupendo hábito para mejorar la productividad ya que mantiene la mente alerta y las funciones cognitivas en altos niveles de rendimiento. Aprende un nuevo idioma, toma clases de fotografía… ¡hay muchas opciones!
3. Ábrete a nuevas ideas y exponte a nuevos entornos. Como humanos, nos encanta la seguridad y la familiaridad. Desafortunadamente, cuando te sujetas a estas dos cosas, también aumentas las probabilidades de quedarte estancado, tanto en la vida personal como en la laboral. Exponerte a nuevas ideas y entornos es una herramienta muy poderosa para mejorar tu productividad. Las experiencias nuevas tienen un gran efecto sobre la química de nuestro cerebro y sobre nuestra manera de ver el mundo, conduciéndonos a una mejora en nuestros procesos de toma de decisiones.
Mira más allá de la burbuja de tu sector o de tu mercado, aprende cosas nuevas y después fusiónalas, mézclalas con la norma de la industria.
4. Duerme bien. Uno de los grandes secretos de las personas altamente productivas es la habilidad, no solo de liderar a los demás, sino de liderarse a sí mismas. El liderazgo requiere el uso de funciones cerebrales como el razonamiento cognitivo, la planificación, la organización o la toma de decisiones. Funciones que, para desempeñarse correctamente, necesitan de una buena dosis de sueño. De hecho, los expertos en neurociencia han concluido que, tras 16 horas despiertos, nuestra capacidad de concentración y nuestras funciones ejecutivas descienden. Un sueño reparador es como la nutrición del cerebro. Tómalo en serio y duerme entre 8 y 9 horas diarias, sin excusas.
5. Prioriza la comida rica en nutrientes. Pensar que la alimentación afecta solo a tu estado físico es un grave error. La nutrición también afecta al nivel de energía mental. Mejora tu alimentación e introduce en tu dieta diaria una mayor cantidad de frutas y vegetales.
6. Lee a diario. La lectura es una gran herramienta, más allá del conocimiento que se adquiere a través de ella. De hecho, la lectura está asociada con la reducción del riesgo de padecer Alzheimer. Leer mantiene la mente despierta y a punto para elevar tus niveles de productividad.